El Ayuntamiento de Teruel asegura que se valorará más la tranquilidad que en años anteriores.
Este año, la apertura de las piscinas turolenses solo tenían un propósito a cumplir: aumentar la tranquilidad en sus recintos. Y así ha sido, que se ha conseguido subir la tranquilidad hasta un 43% con respecto al año anterior. Si en años anteriores se utilizaron otros métodos más polémicos, esta vez se han contado con baños turcos, saunas y zonas sin ruido para lograr la tan ansiada tranquilidad.
Álvaro Fuentecerrada, el precursor de esta iniciativa
“La tranquilidad es lo que más se busca”, con esa frase empezó toda esta lucha por conseguir que las piscinas de Teruel fueran sinónimo de remanso de paz. Y así está siendo.
Como si del nuevo mesías se tratase, Álvaro se ha convertido en el líder de un movimiento en busca del relax, calma y serenidad; logrando que en las piscinas de Teruel predomine la tranquilidad. La fama que ha adquirido el joven le ha permitido comprar varias piscinas de la zona hacer de ellas su lugar de culto a la paz interior. “En mis piscinas no existen razas, géneros o creencias. Todos son bienvenidos, eso sí, deben de estar con la boca cerrada”, comentaba Álvaro.
Subir a un 55% de tranquilidad, el próximo objetivo de Teruel
A pesar de haber obtenido unos resultados increíbles, el Ayuntamiento de Teruel no pierde la esperanza en mejorarlos de cara al año que viene.
Para lograrlo, el ayuntamiento contará con los servicios de Álvaro Fuentecerrada, el chico que valoró por primera vez que la tranquilidad es lo más importante, y así lo han hecho en Teruel. Para ello, algunas de las medidas que se tomarán serán varias: solo los sordomudos podrán hablar en las instalaciones, la gente deberá de nadar por turnos, nada de chapotear y los niños no podrán entrar a no ser que sea con bozal.
