La Organización Mundial de la Salud muestra su inquietud ante el efecto climático al observar el aumento de las temperaturas en la estación maña.
El calor que está viviendo estos últimos días la capital aragonesa no ha pasado desapercibido para nadie, y tal es la situación que hasta en la Estación Zaragoza-Delicias se ha establecido un clima tan cálido que permite tanto a los que van como a los que vienen pasear en manga corta, permanecer ahí sin miedo a coger una gripe y esperar dentro de la estación sin riesgo a perder ningún miembro por congelación extrema.
La OMS tomará medidas
Se acepta el deshielo de los polos y desertización de los bosques, pero que haga calor en el interior de la estación ha hecho que la OMS se tome enserio el cambio climático. Las temperaturas marcadas en los termómetros este mes de febrero en el interior de Delicias ha llegado a las altas esferas de la organización y ha decidido tomar serias medidas para el orden natural de las cosas vuelva a su ser, es decir, que la estación vuelva a estar regentada por el frío.
Máquinas de hielo, nieve artificial en el interior, las ventanas abiertas para que haya corriente y que el aire acondicionado funcione al máximo rendimiento. Y así volver a los inicios.
«¿Dónde está el cambio climático? Que yo lo vea»
Parece que la OMS ha contagiado su preocupación a sus cidadanos y estos han empezado a apoyar las medidas propuestas por el director de la organización desde que uno de ellos publicó en sus redes sociales que aseguraba haber sudado dentro de la estación.
«Esto es muy grave y hay que levantar esta situación entre todos», explicaba éste. «Primero es una gota de sudor en Delicias, pero lo siguiente es que Zaragoza entera se convierta en el nuevo Monegros», añadía.
