La falta de infraestructuras ha hecho que tarde tres dias en llegar, aunque tras tres transbordos y dos cajas de Trankimazin ha conseguido llegar a Teruel.

«Teruel existe, pero hay que tener fe», exclamaba José Manuel González al llegar a la estación de tren de Teruel. El viajero, natural de Argamasilla de Calatrava (Ciudad Real) lleva años viviendo en Madrid. Es desde la capital desde donde empezó su viaje hacia Teruel, aunque lo que él no sabía era el esfuerzo personal que eso le iba a suponer. «He estado a punto de morir en el intento», asegura.

Ha hecho transbordo en Zaragoza y Mordor

José Manuel describe el llegar hasta Teruel como una odisea «Yo no me podía imaginar que en este país se tuviera tan mal comunicada a una ciudad… es lamentable», denuncia. Al parecer para tener que llegar hasta Teruel capital desde Madrid no solo hay que hacer transbordo en Zaragoza, sino que ha tenido que pasar por Mordor, donde hizo noche. «Los orcos son más hospitalarios de lo que parece… aunque habría preferido no tener que ir hasta allí», reconoce.

«Teruel está tan aislada que llegué a creer de verdad que no existía»

Son miles los vecinos que llevan años quejándose de la falta de infraestructuras para llegar hasta la ciudad de Teruel. El caso de José Manuel se suma al gran número de denuncias que las asociaciones de vecinos recogen desde hace años. En palabras del propio José Manuel «Teruel está tan aislada que llegué a creer de verdad que no existía», algo que pudo contrastar a su llegada a la estación. «Teruel existe, pero hay que tener fe», recomendaba. «Yo si tuviera que volver, me plantearía hacerlo en coche oficial de político, que así al menos no hay transbordos», concluía con humor el afectado.