Esta región de Rumanía se ha convertido en la ciudad hermana número 24 con la capital de Aragón.
La característica niebla es la atracción principal que ha hecho que esta unión entre Zaragoza y Transilvania sea posible. El alcalde de Zaragoza y el de Transilvania se reunieron ayer por la tarde para hacer oficial algo que durante tanto tiempo se ha estado considerando, y es que eran tantas sus similitudes que finalmente se ha conseguido llevar a cabo dicha hermandad. Su afán por las construcciones históricas, sus grandes cantidades de campos y su alta cantidad de población rumana ha hecho, junto a la niebla; Transilvania y Zaragoza sean ciudades hermanas.
Hermanados por el clima
La niebla, junto al cierzo, es uno de los efectos atmosféricos a los que más acostumbrados están los que viven en Zaragoza. El clima en la capital maña es tan frío y seco que recuerda tanto a Transilvania que ha hecho que los líderes de ambas regiones decidan hermanarse y así apoyarse entre sí, haciendo ver que este tipo de temporal puede ser bueno para todo aquel que se atreva a aguantarlo.
«Esta decisión nos beneficiará a ambas partes», comentaba Ioan Dorin Dăneşan, alcalde transilvano. «La idea que tenemos es juntar toda nuestra niebla y dársela a los de Teruel Existe, que por lo visto necesitan esconderse un tiempo», añadía.
Drácula, encantado
El famoso conde de Transilvania, una vez ha llegado la noticia ha sus oídos ha expresado su alegría al tener un sitio en el que poder pasear tranquilamente durante sus vacaciones, sin miedo a morir abrasado por el sol.
«Llevo años queriendo salir de aquí, pero todas las ciudades tienen el mismo inconveniente: el sol», comentaba Drácula. «Ahora que tenemos tan buen rollo con Zaragoza podré ir a pasear y disfrutar de sus nieblas y su frío», apostillaba sonriente.
