El calor obliga a los habitantes de Zaragoza a tomar medidas desesperadas.
Una vez se ha disipado el cierzo, Zaragoza se ha sumergido un año más en un verano insoportable por las altas temperaturas registradas a diario. Y para poder sobrevivir a ellas, zaragozanos y zaragozanas buscan cualquier forma de sobrevivir el sofocante calor; la última manera es visitar el Jardín de Inverno del Parque José Antonio Labordeta.
La sugestión mental para pasar el verano
A pesar de estar a casi 40 grados, un gran número de habitantes de la capital de Aragón han visitado el conocido Jardín de Invierno con la intención de obtener un respiro del insoportable calor. Mentalizados de que por incluir la palabra invierno en su nombre, la gente que acude al jardín piensa que no pasará el calor propio del que se vive en la ciudad a finales de julio.
«Quien está acudiendo aquí llega con la mentalidad de encontrarse temperaturas de enero o febrero, y no es así», explicaba uno de los organizadores. «Aún así, la gente se queda esperando el frío», añadía incrédulo.
La ambulancia atendió 16 casos por golpe de calor
Aunque las autoridades sanitarias ya han tenido que advertir a la población de que por llamarse Jardín de Invierno, sigue siendo verano, un gran número de personas han acudido con ropa de invierno para hacer frente a las bajas temperaturas que esperaban encontrarse.
«Casi una veintena de personas han sido trasladadas al hospital por estar con abrigo y bufanda en el parque cuando los termómetros marcaban casi 40 grados», comentaba el Jefe de Ambulancias. «Uno de ellos ha sido detenido por la Policía al ponerse agresivo después de no entender que si era de invierno no tenía que hacer calor», apostillaba.
