El individuo que hizo sus necesidades en mitad del decorado del Belén ha pasado la noche en el calabazo a la espera de la sentencia final.
Avisando de que era su función en Navidad y que el mismísimo San José se le había aparecido en sueños para comentarle semejante misión, este sujeto decidió hacer de vientre junto la lavandera y el herrero. Este hombre ya era conocido en la ciudad por sus extravagantes historias y demás delirios, pero este ha resultado ser el más escatológico de todos.
El nuevo caganer
Al grito de «soy el caganer, soy el caganer», el emisario de San José fue detenido por la Policía Local ayer por la tarde por excretar en el momento que más público estaba visitando el Belén situado en la Plaza del Pilar.
Niños, familias y demás gente pudieron observar cómo este hombre depositaba sus heces en el pesebre mientras se reafirmaba en su posición como figura de este Belén. «La gente le empezó a increpar, pero este no se detuvo hasta acabar la faena al completo», explicaba el Jefe de la Policía. «Una vez acabó, el hombre empezó a gritar que era un enviado de San José en la tierra y que su misión era llenar con su mierda el resto de Belenes de España», agregaba el Policía.
Será trasladado a la planta de psiquiatría
Debido a sus palabras y hechos, el acusado deberá pasar una posible sentencia en psiquiatría a causa de sus desvarios y problemas mentales.
Y es que según han confirmado fuentes policiales, su obsesión con los excrementos no ha quedado solo en el Belén, sino que también ha ido imitando a la figura del caganer en la celda, deponiendo en cada esquina de ella. «Le hemos tenido que poner un pañal para adultos porque sino era imposible aguantar», declaraba uno de los policías.
